Efesios 4:30, el Espíritu Santo es el Sello de Pascua de Dios que nos sella para la Eternidad. Amén. ¡Nos sella para la Eternidad, el Espíritu Santo de Dios! ¡Oh!, ¿están—están contentos? ¿Están contentos por la Pascua? ¿Están contentos por esta experiencia? Sellados, encerrados con Dios en un lugar secreto, encerrados con Dios por Su Divina gracia, sellados hasta el día de nuestra redención. Ese es el real y verdadero Sello de Pascua.
- El Hermano Branham